Basado en datos meteorológicos recientes
Para la estimación con la Opción Avanzada, se consideran los datos climáticos acumulados durante un período más extenso, buscando reflejar las condiciones a lo largo del ciclo de crecimiento del cultivo (aproximadamente el último año en este ejemplo, comenzando desde la fecha de siembra). Esto permite una evaluación más integral del impacto del clima en el rendimiento.
Fórmula simplificada (ejemplo):
Rendimiento estimado = rendimiento base potencial × (ajuste por temperatura promedio del ciclo) × (ajuste por balance hídrico anual) × (ajuste por radiación solar acumulada) × (factor suelo) × (factor riego)
Por ejemplo, para maíz (cálculo ilustrativo):
Rend = 9 t/ha × 0.95 (temperatura promedio adecuada) × 1.08 (balance hídrico favorable) × 1.02 (radiación solar adecuada) × 0.98 (suelo franco) × 1.1 (con riego)
Rendimiento estimado: ≈ 10.5 t/ha
Nota: Este es un ejemplo simplificado para ilustrar la consideración de datos de un período más largo. Los valores base de rendimiento y los factores de ajuste para el ciclo completo variarían significativamente según la región, la variedad del cultivo y las prácticas agrícolas específicas. La precisión de esta estimación depende de la disponibilidad de datos históricos y de la representatividad del último año para las condiciones típicas de crecimiento.
Valores de referencia utilizados para los cálculos (ejemplo - ciclo completo/anual aproximado):
Maíz: Temperatura óptima promedio (18-28°C), Lluvia requerida (500-800 mm), Radiación solar acumulada (aproximadamente 4500 MJ/m² por ciclo).
Soja: Temperatura óptima promedio (16-26°C), Lluvia requerida (450-700 mm), Radiación solar acumulada (aproximadamente 4000 MJ/m² por ciclo).
Trigo: Temperatura óptima promedio (12-22°C), Lluvia requerida (300-500 mm), Radiación solar acumulada (aproximadamente 3500 MJ/m² por ciclo).
Estos valores son referenciales para un ciclo completo y se utilizan para ajustar el rendimiento estimado en la Opción Avanzada. Al analizar un período más largo, se busca evaluar si las condiciones generales del último año fueron favorables para el cultivo.
Es importante recordar que estos valores son guías generales y pueden variar significativamente. Para una estimación precisa del ciclo completo, se requerirían modelos agronómicos específicos para el cultivo y la región.